Los juguetes sexuales de placeres secretos como vibradores, consoladores y juguetes anales entran en contacto directo con fluidos corporales, por lo que es importante saber cómo limpiarlos correctamente. Limpiar los juguetes sexuales no tiene por qué ser complicado, pero las consecuencias de no hacerlo pueden serlo.
“Utilizar juguetes sexuales que no estén limpios puede introducir bacterias no deseadas u otros patógenos como hongos en el entorno vulvo-vaginal, lo que puede provocar el crecimiento excesivo de bacterias conocido como vaginosis bacteriana o causar una infección urinaria”, afirma la sexóloga Amanda Morgan, profesora asociada residente de la Universidad de Nevada, Las Vegas. “Es especialmente importante limpiar a fondo los juguetes que utilizan varias parejas”.
Casi todos los tipos de juguetes sexuales pueden limpiarse en la superficie, con agua y jabón líquido, y luego secarse al aire. Pero también identificaremos las situaciones en las que es mejor desinfectar más a fondo los juguetes.
Para limpiar la superficie
Agua
Jabón: Es preferible utilizar jabón líquido de manos o jabón de castilla. El jabón antibacteriano está bien pero no es necesario. Evite los jabones fuertes, como el detergente para vajilla.
Toallas de papel o paños limpios: Utilícelos para secar al aire los juguetes después de limpiarlos.
Para una limpieza a fondo
Olla para hervir agua: Puedes desinfectar una gran variedad de juguetes limpiando primero su superficie y sumergiéndolos después en agua hirviendo durante unos minutos.
Lejía y botella con pulverizador (u otro recipiente para una solución de lejía): Hervirlos y blanquearlos matará la mayoría de los patógenos de los juguetes, aunque no todos.
Lavavajillas: Asegúrate de que tu lavavajillas ofrece los ajustes adecuados para desinfectar. De lo contrario, es mejor hervir o blanquear los juguetes.
Toallas de papel o paños limpios: Utilízalos para secar al aire los juguetes después de limpiarlos.
